Desde que nacen los hijos y hasta los tres años, los padres no dejan de repetirles constantemente: No muerdas, no metas eso en la boca, no toques eso, es hora de ir a dormir, al baño, a comer, etc. Diciendo estas sencillas frases con dulzura, autoridad, consiguen ir creando el habito de la obediencia que posteriormente se convertirá en virtud. En esas edades, la falta de obediencia suele estar relacionada con los peligros físicos a los que pueden estar expuestos.

Después de los tres y hasta los ocho años las órdenes irán acompañadas de comentarios que las justifiquen, debido a que los hijos ya empiezan a comprender los porqué de las cosas. A partir de los 13 años aproximadamente es cuando la "desobediencia" puede conllevar problemas.
Es en los primeros años cuando los padres tienen que formar el desarrollo de la obediencia, para que cuando sean mayores, encuentren fácil y natural obedecer a los padres y a sus superiores.
A medida que los hijos van creciendo, la forma de decir las cosas va cambiando pues también los hijos van madurando en su entender y en sus respuestas. Enseguida comienza la edad del “no” en los hijos, pues estos empiezan a exigir explicaciones o a negociar con los padres para poder tomar decisiones antes de obedecerles. Esta situación suele provenir por que los padres no han sabido explicarles bien o convencerles, dentro de su capacidad real de entender lo que tenían que obedecer.
Los padres tienen la autoridad y responsabilidad de la educación a los hijos, conferida por Dios y sancionada por las leyes humanas, que tienen que ejercerlas sin excusas ni pretextos. También conllevan la responsabilidad de decidir, premiar, sancionar y responder de lo realizado.
Una de las primeras virtudes que los padres tiene que enseñar a sus hijos desde que son muy pequeños es la de la obediencia. Aunque en los primeros años de su vida, los hijos no se dan cuenta de que están obedeciendo, por que todavía no saben distinguir entre lo que es obedecer y lo que es desobedecer. Pero esta virtud la van adquiriendo, junto a las otras virtudes a través del hábito de la repetición. Así esos hábitos seran virtudes, y ademas, estén a acostumbrados a obedecer cuando lleguen a la edad del desarrollo de su conocimiento donde entran temas importantes como el de la sexualidad.
Algunos hijos desobedecen a sus padres en relación con las normas de conducta en la ropa, horarios, estudios, administración del dinero, etc., pero obedecen a los líderes pandilleros, a los ídolos mediáticos, a los entrenadores deportivos, es decir a personas que no tiene valores fuertes pero que se los han ganado. Por eso es una grave obligación de los padres ganarse a los hijos, principalmente con el ejemplo y con los buenos y adecuados consejos.
Los padres tienen derecho a ser obedecidos, y más interés tendrán los hijos en obedecer en cuanto valoren sus esfuerzos en hacerlo. Cuando los hijos están bien educados en la virtud de la obediencia, tendrán más posibilidades de obedecer a las personas que se cuidan de ellos, desde los profesores, sacerdotes, policías, entrenadores deportivos, parientes, etc. y sobre todo les será más fácil el cumplimiento de las obligaciones con la religión y de la abstinencia sexual a temprana edad.
Cuando se habla de las relaciones sexuales: la obediencia juega un papel fundamental. Se debe obedecer la voluntad de Dios y de nuestros padres, profesores y verdaderos amigos mediante los cuales Dios nos enseña y nos manifiesta las cosas correctas; no obedecer puede causar problemas, ya sea embarazos pre maritales y enfermedades transmitidas sexualmente.


En obediencia a la Palabra de Dios se puede encontrar el amor hacia una persona que no sueña con ese tipo de temas como es el caso del sexo, sino mas bien que estara interesado en un tema mas alla de lo fisico y material, estara interesado en lo que eres, en tu persona y lo que tu como persona le puedes ofrecer; este hecho será muy especial para aquella persona que espere pacientemente y sera con ella con quien querrás compartir el resto de tu vida, amarás a esa persona más de lo que haz pensado y en ese inicio es digno que tú como persona en un marco integral lleves consigo tu pureza sexual; la cual debes de prevenir que sea entregada fácilmente y a cualquiera que digas o te digan amar, se debe recordar que el amor en el Señor espera aunque te parezca difícil mantenerte puro o pura para el matrimonio, cuando este parece tan lejos, pero no es difícil.

En obediencia a la Palabra de Dios se puede encontrar el amor hacia una persona que no sueña con ese tipo de temas como es el caso del sexo, sino mas bien que estara interesado en un tema mas alla de lo fisico y material, estara interesado en lo que eres, en tu persona y lo que tu como persona le puedes ofrecer; este hecho será muy especial para aquella persona que espere pacientemente y sera con ella con quien querrás compartir el resto de tu vida, amarás a esa persona más de lo que haz pensado y en ese inicio es digno que tú como persona en un marco integral lleves consigo tu pureza sexual; la cual debes de prevenir que sea entregada fácilmente y a cualquiera que digas o te digan amar, se debe recordar que el amor en el Señor espera aunque te parezca difícil mantenerte puro o pura para el matrimonio, cuando este parece tan lejos, pero no es difícil.
Las relaciones sexuales pueden ser solamente fabulososas, magicas e increibles en el marco de una relación matrimonial. Satisfacen más y no tienen culpas ni preocupaciones cuando se comparten sólo con la persona con quien pretendes vivir el resto de tu vida; guarda la maravillosa experiencia del sexo para tu matrimonio; si lo decides, luego veras que valdrá la pena haberlo esperado. Obedece a los mandamientos de Dios, a los acatamientos de tus padres y superiores: ese es el camino seguro hacia la FELICIDAD! :D
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